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4/6/2015 

Una crema para tratar los problemas de erección se venderá con receta médica a partir del 1 de junio en las farmacias francesas, anunció el laboratorio francés Majorelle. 


Ciudad de Buenos Aires (Argentina).- La droga se llama sildenafil pero se conoce como viagra y transformó la vida de millones de personas solucionando los problemas de erección. Es la pastilla que revolucionó la sexualidad en la década del 90. El sildenafil --tal el nombre de la droga, que en todo el mundo se popularizó con el nombre de una de sus marcas comerciales-- cambió la vida sexual de millones al tratar de manera efectiva los problemas de erección. Ahora hay una presentación en crema.
 
El medicamento, una "alternativa a los comprimidos" (Cialis, Viagra y otros) para el tratamiento de los problemas de erección, se comercializará con el nombre de Vitaros, a un precio de 10 euros por dosis (cuatro por caja), según el representante del laboratorio francés.
 
La crema se conserva en la heladera (entre 2°C y 8°C), pero se puede guardar fuera durante menos de tres días, si la temperatura es inferior a los 25°C. Se debe utilizar con un preservativo de látex. Su principio activo, el alprostadil, es una sustancia que dilata los vasos sanguíneos del pene.
 
Se aplica una gota del producto en el meato urinario, la apertura del pene, sujetando este en posición vertical. El efecto tarda entre cinco y 30 minutos en aparecer y puede durar entre una y dos horas, según los pacientes, precisan las instrucciones del medicamento.
 
El Vitaros tiene, sin embargo, una serie de contraindicaciones para los adultos. Supone un riesgo para los hombres que sufrieron un infarto de miocardio o para los que padecen hipotensión ortostática (caída de la tensión arterial cuando una persona se pone de pie tras haber estado acostada). Tampoco se recomienda su uso a las personas con riesgos de trombosis venosa.
 
Durante los ensayos clínicos, se produjeron raros casos de vértigos y síncopes, por lo que los pacientes deben evitar conducir o realizar actividades peligrosas tras utilizar la crema.
 
Majorelle compró la licencia del producto a la compañía estadounidense Apricus Biosciences para Francia, Mónaco y el norte de África.



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