11/1/2010 Las consultas crecieron 30%. Estudiar y trabajar. Mantener el propio hogar o ayudar a la familia. Cuidar a la pareja y a los amigos. Proyectar un futuro mejor y mientras, surfear el presente. El estrés afecta la capacidad de aprender cosas nuevas. Buenos Aires (Argentina).- Hoy, los jóvenes tienen la agenda completa y la memoria, confirman los especialistas, comienza a fallar. La razón de estas "lagunas mentales", tiene nombre: el estrés, enemigo invisible que corroe las cabezas y los cuerpos, y que ya dejó de ser patrimonio exclusivo de los adultos. La preocupación de los especialistas consultados por Clarín es que muy pocos registran que se olvidan actividades o que les cuesta concentrarse porque están agotados o muy presionados. Y si la consulta no se hace a tiempo, es más difícil revertir el cuadro. "¿Cerré la puerta con llave?". "No llego al parcial, mejor lo dejo para más adelante". Frases típicas, según los especialistas, que pintan los motivos de consulta de muchos jóvenes de entre 20 y 30 años. Aunque las estadísticas en el país son pobres -y hasta inexistentes-, los expertos aseguran que hoy el estrés se instala antes de llegar a la adultez. "Las consultas de jóvenes de entre 18 y 30 años crecieron un 30%. Y siguen en aumento", reconoce Daniel López Rosetti, presidente de la Sociedad Argentina de Medicina del Estrés (SAMES). - Pero, ¿qué les preocupa? "Su inserción laboral y conservar el trabajo, porque nadie les garantiza la permanencia. Los inquieta su identidad -no poder responder 'quién soy'- y su identidad sexual. También los moviliza la fractura de la ilusión de familia ideal: en un mercado laboral que se plantea como 'el juego de la silla', ¿quién puede asegurarse una pareja, hijos, casa, auto, perro?", plantea Andrés Rascovsky, médico psicoanalista y presidente de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA). "El tratamiento de un trastorno de memoria en un joven depende de un buen diagnóstico que explique el porqué de la pérdida de memoria. Tratando la causa, el cuadro debería mejorar", apunta Facundo Manes. Y agrega: "Sin dudas, cambiar ciertos hábitos de la vida cotidiana contribuyen a mantener el cerebro saludable y a reducir el riesgo de padecer deterioro cognitivo". Cuidar la dieta incorporando alimentos variados con bajo contenido de grasas, hacer actividad física diariamente, chequear con el médico el estado de la presión y evitar el tabaco y el alcohol son algunos de los consejos. - Recomendaciones
El Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), aconseja realizar una serie de sencillos ejercicios para dinamizar la memoria (herramientas útiles no sólo para los jóvenes):
• Diga los meses del año ordenados alfabéticamente. • Diga el número del teléfono de su casa de atrás para adelante. • Diga los nombres de los planetas de atrás para adelante. • Ordene de menor a mayor los meses del año según la cantidad de días que tengan. • Ordene de menor a mayor los números de su teléfono. También hay recursos online para evitar que la memoria se deteriore, mediante juegos, enigmas, tests y otras actividades. http://www.psicoactiva.com/tests.htm | |