Marsella, (Francia).- En un juicio sin precedentes por una práctica desleal en tratamientos estéticos, cinco directivos de la empresa francesa PIP empezaron a ser juzgados hoy y hasta el 17 de mayo en Marsella por engaño agravado y estafa, entre otros cargos. Los acusan de haber fabricado implantes mamarios con un gel de silicona inadecuado.
La causa tiene más de 5.000 demandantes de varios países entre ellas 100 argentinas. Participan 300 abogados y son 5 los acusados. Las mujeres reclaman una indemnización del estado francés del orden de los 3.000 euros para cada una. El blanco de la acusación es Jean-Claude Mas, de 73 años, quien en 1991 creó la empresa PIP, que fabricaba esas prótesis.
La investigación terminó a fines de 2011. Según la fiscalía, se presentaron 5.127 demandantes. Son en su mayoría francesas (95%), pero hay también argentinas, austríacas, suizas, belgas, españolas y británicas. Se calcula que 300.000 mujeres se colocaron las PIP (Poly Implant Prothèse). Todas podrán sumarse a la demanda hasta la víspera de la requisitoria de la fiscalía (sería el 14 de mayo).
- Rotura de la prótesis
La tasa de rotura de una silicona adecuada es de menos del 1% en 10 años. En las PIP, es de 17,9% en 5 años, según explicó la abogada Virginia Luna, que coordina a las 400 damnificadas argentinas que presentarán una demanda colectiva contra la ANMAT.
Las prótesis estaban fabricadas con siliconas para uso industrial, altamente tóxicas, prohibidas por la agencia francesa del medicamento para cualquier tratamiento clínico. Son productos que se emplean habitualmente como aditivos para carburantes y para la fabricación de tubos de caucho y que costaban diez veces menos que el gel homologado. Eso suponía un ahorro de casi un millón de euros anuales para la empresa, pero a cambio el porcentaje de roturas de las prótesis era altísimo.
La rotura de la prótesis obliga a realizar una nueva intervención quirúrgica de urgencia para cambiar el implante. Se detectaron casos de irritación o inflamación porque el gel industrial entró en contacto con el tejido mamario. Sólo en Francia, según datos oficiales, hubo 4.100 casos de rotura.
En todo el mundo, entre 300.000 y 400.000 mujeres se colocaron siliconas PIP entre 1991 y 2011, ya que la empresa llegó a exportar el 84% de su producción a más de 65 países. En Argentina se calcula que se las pusieron al menos 10.000.