Ciudad de Buenos Aires (Argentina).- El Día Mundial de la Espina Bífida e Hidrocefalia han sido establecidos y designados por la Asamblea General de la Fundación Internacional para la Espina Bífida y la Hidrocefalia (IFSBH) en Guatemala 2011 con el objetivo de aumentar la conciencia y la comprensión de la espina bífida y la hidrocefalia. También significa abogar y promover los derechos de las personas con estas condiciones.
Es una oportunidad para tomar conciencia sobre esta patología y promover los derechos de las personas que las padecen. La ingesta de multivitaminas con ácido fólico antes de la concepción, contribuye a reducir el riesgo de anomalías congénitas como espina bífida, mielomeningocele, anencefalia y algunos defectos cardíacos.
La espina bífida está caracterizada por el desarrollo incompleto del cerebro, la médula espinal, o las meninges (la cubierta protectora alrededor del cerebro y la médula espinal). Es el defecto del tubo neural más común en los bebés recién nacidos.
La espina bífida es una malformación congénita (llamada comúnmente defecto congénito) por la cual la columna vertebral no se desarrolla normalmente en las primeras semanas del embarazo. Ello provoca daños permanentes en la médula espinal y el sistema nervioso y puede dar lugar a parálisis de los miembros inferiores o problemas funcionales del intestino y la vejiga.
La mayoría de los niños con espina bífida también desarrollan hidrocefalia, un trastorno que ocasiona la acumulación de líquido cefalorraquídeo en la cabeza y con ello un aumento de la presión y una expansión del cráneo a un tamaño mayor que el normal. También puede provocar convulsiones, visión tubular, discapacidad mental o muerte. El tratamiento consiste en colocar quirúrgicamente un conducto (shunt) en un ventrículo para drenar el exceso de líquido.
Hoy se sabe que "la ingesta de ácido fólico durante el embarazo previene espina bífida, hidrocefalia y defectos del tubo neural en un 70 por ciento”. Y en ese sentido, “como padres, tenemos la obligación de difundirlo para prevenir”.
Está comprobado científicamente que estos problemas se previenen con la ingesta de ácido fólico antes de la concepción y durante el primer trimestre del embarazo.
Estudios médicos han demostrado que al agregar ácido fólico a sus dietas, las mujeres en edad de procrear reducen significativamente el riesgo de tener un hijo con un defecto del tubo neural, como la espina bífida. Por ello, se recomienda que todas las mujeres en edad de procrear consuman diariamente ácido fólico. Los alimentos con alto contenido de ácido fólico comprenden verduras verde oscuras, yemas de huevo y algunas frutas. Muchos alimentos, como algunos cereales para el desayuno, panes enriquecidos, harinas, pastas, arroz, y otros productos integrales, ahora vienen fortificados con ácido fólico. Muchas multivitaminas también contienen la dosis recomendada de ácido fólico.
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