Ciudad e Buenos Aires (Argentina).- Miembros de sociedades científicas, decanos de diferentes universidades nacionales y funcionarios del ámbito de la salud advierten que la Argentina está en riesgo de perder el status de "país libre de sarampión" si el brote continúa.
Desde la eliminación de la circulación endémica del virus, ocurrida en 2000 y certificada en 2016 por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), se informó de manera oficial que nuestro país se encuentra hoy por hoy con el mayor brote de sarampión, que registró un muerto esta semana, el primero desde 1998.
Reunidos con el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, los profesionales, especialistas y funcionarios firmaron un documento de consenso en el que comparten la preocupación de las autoridades sanitarias por la actual situación epidemiológica, y avalan las acciones que se están llevando a cabo para la contención del brote.
Durante el encuentro se firmó una declaración de adhesión y consenso a las recomendaciones emitidas por la cartera de Salud nacional, ante el brote de sarampión en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y las Regiones Sanitarias V, VI, VII y XII de Ia provincia de Buenos Aires.
Todos coincidieron, además, en la necesidad de reforzar las medidas de contención a través de:
- Estrategias intensificadas de vacunación
- La detección oportuna
- La notificación de los casos sospechosos
"Hoy tenemos las vacunas y necesitamos arrancar desde la conciencia colectiva de la importancia de la vacunación, hasta el funcionamiento del sistema, para lograr el ritmo de vacunación necesario para detener este brote", explicó el ministro González García.
Los casos de sarampión siguen en aumento y ya son 144 las personas que fueron diagnosticadas en el país con la enfermedad, desde el brote que comenzó en agosto del año pasado.
Según informó el Ministerio de Salud de la Nación en un "Alerta Epidemiológica", del total de casos confirmados tres presentan antecedente de viaje a Estados Unidos y otros tres a las ciudades brasileñas de Río de Janeiro y Florianópolis.
- SARAMPIÓN
Es una infección viral respiratoria altamente contagiosa. Los síntomas incluyen fiebre, tos, conjuntivitis y una erupción cutánea extensa en todo el cuerpo. No tiene tratamiento específico y es mortal en 1 a 2 casos cada 1000 personas que la contraen.
Las complicaciones de esta enfermedad pueden ser muchas y variadas. Las más graves fueron advertidas por médicos en la revista "BMJ Case Reports" después de tratar a una serie de adultos con la infección. "Actualmente se están produciendo grandes brotes con muertes en países europeos que previamente habían eliminado o interrumpido la transmisión endémica", escriben los autores, agregando que solo en los primeros seis meses de 2019, se reportaron 10 mil casos de sarampión en Europa.
El sarampión se contagia a través del contacto directo con las secreciones nasales o de la garganta de personas infectadas, o con menor frecuencia, a través de la transmisión aérea.
"Es una enfermedad que se puede erradicar, actualmente estamos teniendo un brote por goteo, es decir cuatro o cinco casos por semana, por lo que el desafío es intensificar la vacunación en aquellas zonas de baja cobertura porque allí podrían aparecer mas casos e inclusive algún otro caso fatal", remarca Carla Vizzotti, secretaria de acceso a la salud, del Ministerio de Salud de la Nación.
Cuando alguien tiene sarampión, el 90% de las personas con las que entra en contacto se infectarán, si son susceptibles (no han sido vacunados o no han padecido la enfermedad). Dada la gran eficiencia de la transmisión del sarampión, se pueden presentar brotes en poblaciones con relativas buenas coberturas de vacunación (sólo 3% a 7% de susceptibles), señala Florencia Cahn, médica infectóloga.
Entre los factores de riesgo para el sarampión se incluyen
- No estar vacunado. Si no recibiste la vacuna contra el sarampión, es mucho más probable que manifiestes la enfermedad.
- Viajar a diferentes países. Si viajas a países en desarrollo, donde el sarampión es más frecuente, tenés un riesgo mayor de contraer la enfermedad
- Tener deficiencia de vitamina A. Si no tenés la cantidad suficiente de vitamina A en tu dieta, es más probable que tengas síntomas más graves y complicaciones.