La Plata, Pcia de Buenos Aires (Argentina).- El dolor es un síntoma muy frecuente en los pacientes con cáncer, que no es sólo expresión de un síntoma sino también de un padecimiento que acarrea consecuencias físicas, psicológicas y sociales. De ahí que su tratamiento es fundamental para el bienestar de los pacientes oncológicos.
"Desde el inicio de la gestión, la gobernadora María Eugenia Vidal priorizó el abordaje total del tratamiento porque el cáncer es una enfermedad que no puede esperar", precisó el ministro de Salud Andrés Scarsi. "Antes de lanzar el -Plan Provincial de Control de Cáncer, en 2016,- los pacientes oncológicos del sistema público de salud no recibían tratamiento alguno contra el dolor. Por eso, primero empezamos comprando estos medicamentos, y hoy ya los estamos produciendo", agregó.
"Esto adquiere dimensión si se tiene en cuenta que el tratamiento del dolor moderado implica al paciente un gasto de bolsillo de alrededor de $3.000 por mes, lo que lo vuelve inaccesible para gran parte de las personas que padecen la enfermedad", agregó Scarsi.
Desde el plan provincial, su referente María Viniegra detalló que "el tratamiento del dolor se realiza escalando la medicación en función de la severidad". Según su intensidad, se habla de dolor leve, moderado o severo. "Cuando el dolor es severo, se emplean opioides fuertes (morfina y metadona), y cuando el dolor es moderado se utilizan antiinflamatorios y opioides débiles (tramadol, ibuprofeno, paracetamol)", explicó la especialista.
En tanto, los medicamentos que ya produce el Instituto Biológico son tramadol, ibuprofeno, paracetamol y, próximamente, pregabalina. Este desarrollo se traducirá en un ahorro de alrededor de 1 millón de pesos este año, que antes se destinaban a la compra de estos fármacos, según informaron desde la cartera sanitaria. Anualmente, a partir de ahora se ahorrarán más de dos millones de pesos.
El Plan Provincial de control del Cáncer comenzó a implementarse en 2016 con el fin de abordar la enfermedad de manera integral, para poder brindar a los bonaerenses que no tienen cobertura formal el acceso a la detección temprana, al diagnóstico y tratamiento y al cuidado paliativo o tratamiento del dolor.