Ciudad de Buenos Aires (Argentina).- Una mujer de 39 años murió a causa de una embolia pulmonar, que se desencadenó luego de que recibiera una inyección de vaselina en sus pechos. El caso ocurrió en Santa Rosa, La Pampa, y ahora las autoridades sanitarias locales están investigando si la mujer se aplicó el líquido sola o si fue asistida por otra persona.

 

La muerte de Sonia Pérez Llanzón se produjo el 6 de marzo. La mujer, atleta y boxeadora amateur, había permanecido un mes internada en el área de Clínica Quirúrgica del hospital Lucio Molas de Santa Rosa, donde había llegado a principios de febrero. “Ingresó con unas lesiones en las mamas. Era como golpes”, explicó el jefe de clínica quirúrgica del Hospital santarroseño, Julio Plá Cárdenas. Además de los moretones, los médicos detectaron una inflamación a la altura del tórax.

 

Con el correr de las horas, Pérez Llanzón comenzó a presentar dificultades respiratorias. Pero en un principio, la mujer se negó a revelar las causas por las que había sufrido esas lesiones.

 

“Primero negó todo, pero después terminó contando que se había aplicado vaselina”, dijo Plá Cárdenas. El médico explicó que “la vaselina es un líquido oleoso, se hace con petróleo, es muy denso”. El peligro radica en que si la vaselina ingresa al torrente sanguíneo, puede provocar serias dificultades respiratorias una vez que llega a los pulmones.

 

“En toda mi vida de médico nunca vi un caso así”, aseguró Plá Cárdenas, que es un reconocido profesional santarroseño. “El organismo tiene anticuerpos para remover bacterias y virus, pero con este tipo de elemento no tiene mecanismo de defensa”, precisó.

 

El cuadro inicial se agudizó y causó problemas respiratorios que obligó a los médicos a colocarle un respirador artificial. Después de casi un mes de internación, Sonia Pérez Llanzón murió de una embolia pulmonar, que es una obstrucción brusca de la arteria pulmonar.

 

Con 39 años, Pérez Llanzón tenía una intensa actividad deportiva. Era atleta y había conseguido títulos nacionales hace apenas dos años. También se dedicaba al boxeo, de forma amateur. Era, además, muy cuidadosa con su figura y su estética. El año pasado sufrió quemaduras de tercer grado por tomar sol. “Lo que me alegra de mis logros deportivos, no son las medallas sino el transmitir a mi hijo lo bueno de hacer deporte”, publicó en su perfil de una red social.

 

A pesar que la mujer confesó el implante de la vaselina, no brindó precisiones en qué circunstancias se realizó la aplicación. 

 

El propio médico afirmó que “las autoridades ya saben de este hecho. Ella no dijo si se inyectó la vaselina o hubo otra persona. Pero lo tenemos que saber porque puede haber otras personas en la misma situación. Y corren peligro si es así”.